Si estás pensando en darle un toque original a tu hogar, la manera en la que decores las paredes de la vivienda puede ayudarte mucho a conseguir ese propósito. ¿Conoces alguna técnica para pintar paredes aparte de la que se utiliza normalmente para decorar un hogar? En este artículo te mostramos cómo darle un toque distinto a las paredes de casa.
La pintura es la base de toda decoración. Con ella podrás darle un aspecto más informal a cualquier estancia. Por ejemplo, la habitación de los niños puede quedar realmente bien si se pinta con la técnica del baño de esponja.
Con la esponja o un peine para pintura
Con el baño de esponja se logran texturas muy llamativas para decorar las paredes. Cuando vayas a pintar la habitación elige dos colores de pintura, uno para la base y otro para el acabado con la esponja. Por ejemplo, el de la base puede ser blanco y el del acabado, violeta. Pintas la pared con una brocha o un rodillo. Una vez se haya secado esta mano de pintura, humedeces la esponja en el otro bote de pintura y la restriegas enérgicamente por la pared.
Por otro lado, si siempre te atrajeron las paredes de rayas hay una técnica para pintarlas que deberías conocer. Es el método del peinado. Primero aplicas una capa normal de pintura. Acto seguido y cuando aún está húmeda la pared, coges un peine para pintura y lo pasas por encima. Crearás un rastro de pintura que será similar al rayado que tanto te gusta. El efecto que se queda es muy interesante y sin necesidad de empapelar la pared.
El trapeado
¿Conoces la técnica del trapeado? La puedes aplicar añadiendo o quitando pintura. Siempre has de aplicar una base de pintura. Antes de que ésta se seque, si quieres aplicar el trapeado quitando pintura tendrás que coger el trapo e ir levantando parte de la pintura que ya está sobre la pared. Si lo que quieres utilizar es el trapeado añadiendo pintura, moja el trapo en otro color y pinta por encima.